Los cuerdos lo recuerdan

"Vivían en el uno, eran en el otro,
compartian el aliento.
Amantes del silencio.
Espaldas y arañazos.
Dos piezas encajando,
sus cuerpos en abrazos.
Acuerdate, que tenemos que olvidarnos.
Eran piel y saliva, eran el ultimo suspiro de un suicida, eran caricias que supuraban la agonía, del final de cuento, del lodo y el frío asesinando al viento,
eran el motivo de querernos,
Acuerdate, que tenemos que olvidarnos
Cuando quisieron reventaron, de tanto querer aguantar, de tanto que se amaban, murieron por no matar, por quererse demasiado,
siempre en el sentido inverso del que dicta la razón y consideran apropiado.
Cuando recuerdes su olor, cuando pidas perdón, cuando busques calor,
Cuando recuerdo tu olor,
Cuando busco en tu pecho mi rincon,
Cuando quieres recordar el temblor de la tierra por besarnos
Entonces, acuérdate, que tenemos que olvidarnos"

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